¿Estás planeando una escapada de fin de semana especial? Te proponemos visitar el pueblo azul de Marruecos. Chefchaouen o Chaouen (como le llaman los locales) es un destino de cuento. Todas las calles del centro histórico están recubiertas de pintura azul que contrastan con el verde de las montañas que rodean la ciudad. ¿Listo para descubrir la perla azul marroquí? Te contamos todo lo que necesitas saber para disfrutar de su ambiente mágico durante 2 días.
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Índice del artículo
El pueblo azul de Marruecos: por qué es azul
Que todas las fachadas de Chefchaouen sean azules no es una moda pasajera. Hay documentos que indican que la mayoría de fachadas en Chefchaouen son azules desde el siglo XV, ¡y entonces aún no existía Instagram! 😉
Ni siquiera los locales consiguen ponerse de acuerdo por el auténtico motivo de que el color azul invada las calles de esta ciudad tan pintoresca. Te dejamos algunas de las teorías más aceptadas de por qué es azul, ¡tú mismo puedes elegir la que te suene más convincente!
- Los tonos azules ahuyentan a los mosquitos.
- En 1930 hubo una gran ola de refugiados judíos en la ciudad que pintaron las paredes azules en señal de libertad, para borrar el verde que representa al Islam.
- La pintura azul ayuda a mantener las casas a una temperatura agradable incluso en los meses de más calor.
- Representa el color del agua que cae de la cascada Ras-el-Ma, la fuente de agua potable de la ciudad.
- Queda estéticamente bonito, atrae a los visitantes y el azul representa el optimismo en la cultura islámica.
Cómo llegar a Chefchaouen
El pueblo azul de Marruecos «Chefchaouen» es una ciudad pequeña con unos 40.000 habitantes ubicada en mitad de las montañas del Rif. No tiene aeropuerto ni estación de tren, solamente se puede acceder por carretera. ¿Cómo llegar?, los autobuses CTM llegan desde Fez (4 horas de viaje) y Tánger (unas 3 horas de trayecto). Las carreteras son de montaña con bastantes curvas, así que si te mareas es muchísimo mejor alquilar un coche o contratar un conductor privado.
Actividades imprescindibles que hacer en Chefchaouen
En Chefchaouen hay actividades imprescindibles que hacer, desde enamorarse de las calles azules hasta explorar las montañas del Rif.
Enamorarse de las calles azules de la medina y sus gatos
Sobra decir que el principal atractivo de Chefchaouen son sus calles pintadas en mil tonos de azul. Callejear sin rumbo por las calles estrechas de la medina es el mejor plan. Que no te de miedo perderte, ¡esa es la gracia! Descubrirás arcos, patios interiores llenos de plantas, puertas que son auténticas obras de arte… Como la ciudad azul está construida parcialmente sobre una colina, sus calles están llenas de rampas y escaleras. Tenlo en cuenta para llevar calzado cómodo en la maleta a Marruecos.
Por si el lugar no fuera lo suficientemente bonito y especial, como para enamorarse, tiene un elemento que lo hace todavía más especial. Las calles del centro histórico están llenas de gatos adorables. Si eres amante de los felinos, seguro que querrás adoptarlos a todos.
Comprar souvenirs en el zoco
En las calles principales de la medina hay muchas tiendas con souvenirs y artesanías. Son ideales para llevarte un trocito de Chaouen de vuelta a casa. En el zoco encontrarás todo tipo de productos: alfombras, ropa, cajitas de madera, imanes, figuras decorativas, sombreros, bolsos de rafia y un largo etcétera.
Disfrutar las vistas desde la kasbah
Es evidente que las fachadas de todas las construcciones de Chefchaouen, pueblo azul de Marruecos, son una preciosidad. ¿Quieres ver una de ellas por dentro? Te recomendamos entrar a la kasbah, ubicada en la plaza Outa-el-Hammam desde que se fundó la ciudad en 1471.
Dentro hay un museo sobre la historia de la ciudad azul de Marruecos. Podrás ver cómo era hace décadas a través de fotos antiguas, así como trajes, cerámica decorativa, instrumentos musicales y otros objetos históricos. Pero lo mejor es la vista panorámica de la medina desde lo alto de su torre. ¡Un mirador de primera!
Ver el atardecer desde la mezquita española
Para tener la mejor panorámica de Chaouen debes alejarte del centro de la ciudad. A unos 20 minutos a pie, sobre una colina, encontrarás la mezquita española. Como puedes imaginar, se construyó en los años 20 durante el protectorado español. Actualmente está abandonada, pero sigue siendo un punto de reunión para disfrutar de las vistas.
Al atardecer, tanto locales como turistas se suelen acercar hasta allí para terminar el día viendo como se pone el sol tras las montañas del Rif, sobre el mar de edificios azules. Desde allí también apreciarás que únicamente en la medina predomina el azul. En la zona moderna de Chefchaouen la mayoría de fachadas son blancas.
Explorar las montañas del Rif
No te dejes acaparar por el azul de las calles, el color verde de las montañas que rodean Chefchaouen también mola mucho. Hay diversas rutas de senderismo por el parque nacional de Talassemtane perfectas para disfrutar del paisaje árido y ver la ciudad bien pequeñita desde lo alto de las montañas del Rif. Después de una buena caminata, puedes refrescarte en las cascadas de Akchour.
Dónde comer en Chefchaouen
¡No te marches de Chefchaouen sin probar la riquísima gastronomía marroquí! Uno de los platos más típicos es la Pastilla, un pastel de carne cubierto de hojaldre. En el restaurante Aladdin la hacen riquísima, además podrás comer en la terraza con unas bonitas vistas de la ciudad.
Otro restaurante genial de cocina tradicional marroquí es Lala Mesouda. Sus couscous y tajines están para chuparse los dedos.
¿Quieres comer algo rápido? Prueba los sándwiches de Populaire, están riquísimos. Hay para todos los gustos, pero te recomendamos el de carne especiada con salsa de yogur.
Para detenerse a tomar algo y reponer fuerzas durante un día intenso de turismo, encontrarás un montón de puestecitos en la medina que venden zumo de naranja recién exprimido. Se podría considerar la bebida oficial de Chefchaouen.
Cosas que debes saber antes de visitar Chaouen
Ahora que ya sabes casi todo sobre el precioso pueblo azul de Marruecos, Chefchaouen, te damos unos consejos finales, cosas que debes saber y que te serán muy útiles al llegar a Chaouen.
Prácticamente todo el mundo habla español
¡No hay que preocuparse si no tienes ni idea de árabe o inglés! Prácticamente todos los habitantes de la ciudad saben español. Y es que Chefchaouen fue controlada por las tropas españolas desde 1920 hasta 1956 como consecuencia del tratado de Algeciras. ¡Incluso el nombre de las calles está en nuestro idioma!
Ojo con los guías espontáneos
Seguramente se te acercarán varios chicos «guías espontáneos» ofreciéndote ayuda para moverte por la laberíntica medina de Chefchaouen. Ten en cuenta que si aceptas seguirles, se lo tomarán como un servicio de guía turístico y te acabarán pidiendo dinero. Incluso aunque al principio parezca que quieren hacerte un favor.
Hazte con una tarjeta SIM en Chefchaouen
No hay nada como disponer de datos en tu teléfono móvil para poder orientarte usando cualquier app de mapas y seguir en contacto con los tuyos. ¡Todos sabemos lo agobiante que es depender de encontrar WiFi! Para ahorrarte los cargos desorbitados del roaming, lo mejor es hacerte con una tarjeta SIM Marruecos con datos para viajar.
Asegúrate de llevar siempre efectivo encima
Pese a ser un destino muy turístico, la mayoría de tiendas en Chefchaouen, el pueblo azul de Marruecos, solamente aceptan efectivo. Si necesitas sacar dinero, hay un cajero automático en la plaza principal.
Los viernes encontrarás algunas tiendas cerradas
Como en todos los países musulmanes, el viernes se considera un día sagrado en Marruecos. Por ese motivo, muchas tiendas bajan la persiana (estarán cerradas).
No te alarmes si te ofrecen marihuana mientras paseas por las calles de Chaouen
Hay muchísimas plantaciones de marihuana en la zona, así que su consumo es bastante habitual pese a no estar legalizado. De hecho, hay turistas que visitan la ciudad justamente por eso.
Blanca y Albert (Los Traveleros). Nos conocimos estudiando Periodismo, pero pensamos que sería buena idea saltarnos las clases para escaparnos a viajar. Descubrimos que adoramos la sensación de cogernos de la mano ilusionados justo antes de que el avión despegue. Nueva York fue nuestro primer destino y sigue estando entre nuestros favoritos. Desde entonces, ya hace 7 años, no hemos parado de recorrer el mundo en busca de experiencias. Hemos tenido la suerte de conocer juntos 60 países diferentes. ¡Y vamos a por más!
